El salpicadero de un automóvil, esa parte aparentemente cotidiana pero esencial, alberga una serie de componentes cruciales para el funcionamiento y seguridad del vehículo. Desde la instrumentación que nos provee información vital sobre el estado del automóvil, hasta los espacios guardaobjetos que nos facilitan el almacenamiento de pertenencias durante el viaje, pasando por los complejos sistemas de cableado y los cruciales airbags que garantizan nuestra seguridad en caso de un accidente.
El origen inglés del salpicadero: DASHBOARD
Entendemos que en la cultura anglosajona se refieren al panel que contiene la instrumentación, el airbag y otros elementos funcionales del vehículo como “dashboard”. La primera definición en el diccionario mencionado establece que se trata de “un panel que se extiende por el interior de un vehículo (como un automóvil) debajo del parabrisas y que generalmente contiene instrumentos y controles”.
Sin embargo, lo que nos interesa en este caso es la tercera acepción del término inglés. Según el diccionario de Merriam-Webster, ‘dashboard’ era una pantalla colocada en la parte delantera de un vehículo, generalmente tirado por caballos, con el propósito de interceptar agua, barro o nieve. El nombre “dashboard” proviene del verbo compuesto “dashed up”, que podría traducirse al castellano como “arrojar”.
En sus orígenes, los coches de caballos presentaban una especie de barrera en su parte delantera para resguardar al conductor del barro u otros desechos que podían ser arrojados hacia arriba por los cascos de los caballos. Estas barreras, precursoras directas de los vehículos modernos, podían estar confeccionadas en madera o cuero.
El diccionario inglés de Oxford menciona que la palabra ‘dashboard’ fue registrada por primera vez en 1847. Con la llegada de los primeros vehículos motorizados, como el Daimler Stahlradwagen alemán que inspiró los primeros modelos de Peugeot en 1890, el “dashboard” empezó a cumplir la función de proteger a los ocupantes de aquellos prototipos de los efectos del aceite y el calor emitidos por el motor frontal.
SALPICADERO EN OTROS IDIOMAS
Esta tabla, de variadas funciones, registra diferentes denominaciones según el país en el que se utilice. En Italia, por ejemplo, han elegido el término muy específico y técnico ‘cruscotto‘, que literalmente significa un tablero. Los trabajadores de la FIAT tomaron esta decisión para referirse a esta parte del vehículo en los primeros años del siglo XX, ya que encontraban complicada la pronunciación del término alemán ‘Armaturenbrett’ que aparecía en las piezas que ensamblaban.
Por otro lado, el término francés ‘Tableau de bord‘, el portugués ‘panel de bordo’ e incluso el mencionado ‘Armaturenbrett’ en alemán, no dejan mucho espacio para la imaginación. Este último combina el concepto de tablero (brett) y la acción de encajar (armaturen).
Un caso aparte es el del término “salpicadero” en castellano, sin duda la denominación más evocadora y elaborada de todas las utilizadas en cualquier idioma para describir el conjunto de mandos de un coche.
La evolución del término
Esta fascinante conexión etimológica ha perdurado a lo largo del tiempo, sirviendo como testimonio de la evolución y continuidad en el diseño de los vehículos a motor. Este pequeño detalle nos recuerda cómo la historia y la funcionalidad convergen en los elementos que ahora consideramos comunes en nuestros vehículos contemporáneos. Y nos invita a apreciar la rica historia que se esconde en cada componente de un automóvil, recordándonos que cada parte de un vehículo tiene una historia que contar.
Esta continuidad en el diseño automotriz es un testimonio fascinante de la evolución a lo largo del tiempo. Nos invita a valorar la rica historia que reside en cada elemento de un automóvil, recordándonos que cada parte tiene su propia narrativa. Es un recordatorio de que la funcionalidad y la tradición se entrelazan en nuestros vehículos contemporáneos de formas sorprendentes. Esta relación etimológica perdurará como un tributo a la ingeniería y el diseño en el mundo de los automóviles.
Es muy curioso el origen de los elementos que el ser humano va creando a lo largo de la historia y que, como hemos nacido con ello, damos por hecho que siempre han estado ahí. Pero no, hay mentes ingeniosas que tratan de mejorar la vida de todos y nos hace evolucionar. Por ejemplo, ¿Nunca te has preguntado cuál es el origen del cinturón de seguridad?
FUENTES: ¿Por qué se llama salpicadero el panel frontal del interior del coche? (lavanguardia.com)